¿Qué es el microbioma de la piel? Todo lo que necesitas saber El microbioma de la piel está formado por un grupo (único y personal) de microorganismos con un gran impacto en la apariencia y en cómo sentimos nuestra piel. Este ecosistema invisible se ha convertido en un tema muy popular en el mundo del cuidado de la piel, ya que la reciente aparición de un gran número de investigaciones ha revelado cómo, cuando el microbioma está equilibrado, éste puede protegerse de factores nocivos que deterioran la apariencia de la piel y empeoran sus problemáticas existentes. Comprender cómo funcionan e interactúan las diferentes partes del microbioma te ayudará a identificar qué tipo de productos pueden ayudarte en el cuidado de tu piel. ¿Qué es el microbioma de la piel? El microbioma de la piel está formado por microorganismos "buenos" y "malos" que viven en su superficie. Aunque suene raro necesitas un equilibrio de los dos para tener una piel más saludable y luminosa. Cuando se logra, las bacterias buenas pueden prosperar sin permitir que las bacterias malas se apoderen de la piel. Este equilibrio permite, además, que la piel se proteja mejor de los "invasores dañinos". Así es como los probióticos, prebióticos y posbióticos de la piel trabajan juntos para mantener el equilibrio del microbioma: Los probióticos son microbios vivos que existen en la piel y juegan un papel crucial en la estabilización del microbioma. Los prebióticos son las sustancias que ayudan a alimentar y fomentar el crecimiento y el equilibrio saludable de los probióticos. Los posbióticos son las sustancias beneficiosas que generan los probióticos a medida que se descomponen sobre la superficie de la piel y en su interior. Los posbióticos ayudan a facilitar un microbioma óptimo al retener la humedad vital y fortalecer la barrera de la piel contra los factores ambientales estresantes. Aunque los probióticos siempre suelen llevarse la mayor parte del protagonismo, los prebióticos y los posbióticos desempeñan un papel igualmente (si no más) vital en el cuidado del microbioma de la piel. ¿Cómo puedo mejorar el microbioma de mi piel? El microbioma de la piel puede volverse rápidamente inestable debido a una serie de factores internos o externos, como la contaminación, la exposición al sol y el uso de productos irritantes para el cuidado de la piel. Puedes tomar medidas para protegerte de algunos de estos factores, pero es imposible evitarlos por completo. Aquí es cuando entra en acción un buen cuidado de la piel. Equilibrar el microbioma requiere de una combinación de ingredientes pre, pro y posbióticos. Es importante encontrar un rutina de cuidados que combine estos tres elementos para ver resultados reales. Cuando la combinación es buena, las bacterias malas y buenas de la piel se controlan entre sí, trabajando juntas para crear posbióticos, que incluyen péptidos, proteínas, aminoácidos, enzimas, ácido hialurónico, ácido láctico, ceramidas, antioxidantes y otras sustancias que son vitales para la piel. ¿Qué resultados obtengo con una rutina adecuada? Tu piel está mejor equipada para protegerse contra los factores ambientales estresantes. Los niveles de hidratación se optimizan y mantienen. La piel sensible y las rojeces se calman y se vuelven más estables. Los problemas de la piel disminuyen gracias a la restauración y el mantenimiento de un equilibrio de pH óptimo y saludable. Rutinas para el cuidado de microbioma Muchos productos cosméticos afirman equilibrar el microbioma natural de la piel, pero se centran solo en los probióticos, que es la mitad de la batalla. Como ya te explicamos, se necesita una combinación de pre, pro y posbióticos para obtener buenos resultados. Aplicar solo probióticos no puede equilibrar tu microbioma porque además todos tenemos un microbioma único, diferente y en constante cambio. Ningún producto o mezcla de probióticos (y hay muchos) puede "conocer" exactamente lo que necesita tu piel. El equilibrio se consigue únicamente cuando se logra que los pre, pro y posbióticos trabajen juntos para ayudar a tu piel a protegerse de forma natural. Asegúrate siempre de elegir una buena combinación de productos para lograr un microbioma equilibrado. Otra factor clave para un buen cuidado de la piel son los envases de los productos. Las fórmulas suelen ser delicadas y deteriorarse fácilmente en un entorno inadecuado. Evita los frascos y tarros (la exposición al aire y la luz hacen que la fórmula se descomponga más rápido). En resumen: El cuidado del microbioma de la piel es mucho más que una tendencia del momento: realmente puede ayudar a mejorar la piel de varias maneras cuando se usan las fórmulas adecuadas (basadas en la ciencia). Hidrata tu piel con la fórmula adecuada para tu microbioma. Obtén más información sobre qué hidratante se adapta a tu tipo de piel. Referencias científicas: Nature Reviews Microbiology, March 2018, pages 143-155 Experimental Dermatology, September 2019, ePublication Fermentation, May 2019, pages 1-17 International Journal of Molecular Science, September 2019, ePublication Trends in Food Science & Technology, May 2018, pages 105-114 World Allergy Organization Journal, August 2017, ePublication